Dolor crónico

Vivir con dolor es física y psicológicamente estresante. La psicología cuenta con herramientas para ayudarte a sobrellevarlo mejor.

¿Qué es el dolor crónico?

El dolor, generalmente, es una señal de nuestro sistema nervioso que nos informa de que algo no anda bien.

En este sentido, sentir dolor es adaptativo, pues nos ayuda a responder de forma rápida y a solucionar un problema antes de que tenga consecuencias más graves. Esto es lo que conocemos como “dolor agudo”, que nos ayuda a sobrevivir.

Sin embargo, algunas personas experimentan dolor de forma continuada, con periodos que se pueden alargar semanas, meses o incluso años. Hablamos entonces de “dolor crónico”, que no finaliza cuando cesa la causa que lo originó (o es desconocida), persistiendo en el tiempo y afectando de manera severa a las distintas áreas de vida de la persona.

En ocasiones, se puede identificar el origen del dolor (por ejemplo, puede aparecer tras un golpe o una caída), pero en otras, la persona no sería capaz de decir cuándo comenzó a sentirlo. Vivir con dolor puede llegar a resultar realmente incapacitante, pues la persona experimenta una serie de consecuencias físicas y psicológicas muy desagradables.

¿Cómo puedo saber si mi dolor es crónico?

Podrías sufrir de dolor crónico si te identificas con algunas de las siguientes afirmaciones:

  • Llevas una buena temporada experimentando dolor continuado, bien en una parte concreta de tu cuerpo o bien de forma generalizada (la cabeza, la espalda, las articulaciones, los dedos…) o incluso puedes tener dolor neuropático como parte de otra enfermedad.
  • Quizás no puedas identificar el origen de ese dolor, simplemente un día apareció y ya no se fue.
  • Visitas al médico con frecuencia por esta causa y a pesar de que puedes estar tomando medicación para ello y puede mitigarse algo, sigue estando ahí.
  • Algunas veces has llegado a faltar al trabajo porque el dolor era realmente fuerte.
  • El dolor te impide descansar y dormir correctamente.
  • El dolor está afectando a tus relaciones familiares, de pareja o de amistad.
  • Muchas veces cancelas planes o los evitas por el dolor.
  • Sientes que el tema te está “obsesionando”, pensar en él te produce miedo y ansiedad.
  • Estás empezando a sentirte deprimido por esta situación.
  • Sientes que nadie a tu alrededor te comprende y que pueden pensar que te lo inventas o que estás exagerando.
¿Cuál es el tratamiento psicológico del dolor crónico?

Resulta fundamental comprender que el dolor crónico es un problema en sí mismo y no una consecuencia derivada de otra enfermedad.

Es vital tener un buen diagnóstico realizado por profesionales de la salud capacitados.

Entre los tratamientos que se incluyen para este tipo de patologías, se encuentra la psicoterapia, como componente esencial y complementario a los que se realizan en las Unidades del Dolor especializadas en los hospitales.

¿Sabías que...?
  • Al dolor crónico se le conoce como la enfermedad invisible, puesto que muchos pacientes la sufren en silencio sin encontrar durante mucho tiempo un diagnóstico y tratamiento adecuados.
  • Alrededor del 20% de la población española padece dolor crónico que afecta de manera negativa a su vida.
  • Aunque el aumento de la edad puede suponer un factor de aparición de esta patología, el dolor crónico afecta a todas las edades, incluso a los niños.